no al gato por liebre Sábado, 12 julio 2014

¿En qué te vas a tirar tu CTS?

Luis Davelouis

La libertad se lleva dentro y se ejerce afuera. Es una decisión, nunca algo que te puedan dar. Soy periodista.

 

(FOTO: www.entornointeligente.com)

(FOTO: www.entornointeligente.com)

No te la tires, úsala con inteligencia.

El gobierno decidió reducir la intangibilidad mínima de los depósitos por Compensación por Tiempo de Servicios (CTS) de seis a cuatro remuneraciones brutas (esto es, sin los descuentos de ley como AFP, seguros, impuestos o lo que sea). Cualquier monto por encima de ese saldo mínimo de cuatro salarios puede ser retirado y utilizado como mejor le parezca a cada uno.

Esta decisión del Poder Ejecutivo responde a dos motivos.

El primero es un estudio realizado por el Banco Central de Reserva (BCR) y la Universidad Católica y presentado en febrero según el cual «existen trabajadores formales que pierden su empleo y pasan a la inactividad por que cuentan con recursos suficientes para financiarse por episodios largos (6 meses)». Esto, además -continúa el informe- fomenta la inactividad y la informalidad. ¿Cómo así? Lo observado en el mercado laboral sugiere que el periodo de recolocación de un trabajador que ha perdido su trabajo es de cuatro meses, no de seis. ¡Vaya a trabajar vagazo!

El segundo motivo tiene que ver con las medidas para mitigar o evitar la desaceleración económica que ya todos están reconociendo y algunos aceptando. Así es, la liquidez (tener plata en el bolsillo) alienta el consumo y este a su vez estimula la economía. Y es un montón de plata que se inyectará de un porrazo al sistema pues equivale a que, de pronto, todos los trabajadores formales reciban un sueldo extra.

 

Pero, ¿por qué están tan seguros de que la gente se va a gastar la plata inmediatamente?

Pues porque eso es lo que la gente (no, yo no soy gente) hace: gasta hoy y mañana ya veremos. Esto no es ningún secreto y es perfectamente consistente con la razón por la cual los aportes a un sistema de pensiones son obligatorios y los depósitos CTS son parcialmente intangibles: las personas prefieren gastar que ahorrar para su futuro o para enfrentar alguna emergencia o eventualidad.

Bueno, el asunto es que, según el gobierno a través del ministro Luis Miguel Castilla, esta medida podría inyectar hasta S/.4.000 millones (más o menos el 0,6% del PBI) en la economía. Nada mal, ¿cierto?

Pero hay un problema: si, como el gobierno está proyectando, se avecina una desaceleración de la economía mayor que la que ya estamos vislumbrando, el periodo de recolocación de los trabajadores que pierden su empleo se ampliará y ya no será de cuatro meses en promedio, sino quizás de seis.

Es lógico: las empresas (los actores económicos en general) no se hacen de costos fijos (la planilla es un costo fijo) cuando el ciclo económico está a la baja porque no es razonable (interesante esto último, somos mejores para administrar los activos ajenos que los propios).

 

Entonces, ¿por qué desmantelar o reducir la única protección de los trabajadores entregándoles un dinero que habrán de pulverizar en cuestión de semanas a costa de su seguridad?

Porque, por un lado, el Estado dice que reduce el saldo mínimo de la CTS y le entrega ese dinero a los trabajadores para incentivar la actividad y la economía y fomentar la formalidad, PERO al costo probable de desproteger a esos mismos trabajadores en una coyuntura en la que es posible que veamos pérdidas de empleo.

Es, casi exactamente, como gastarte la plata de tus almuerzos de toda la semana en un Red Bull porque el impacto de esos S/.4.000 millones es de una sola vez. A menos, claro, que ese shot de liquidez, sumado al resto de medidas económicas de los últimos días (baja de tasas de interés, convertir en un adorno al ministerio de Ambiente, entre otros) y las que vienen, reviertan de manera exitosa la temida desaceleración o neutralicen por completo sus efectos. Esto último es poco probable si consideramos que buena parte de la caída viene de afuera, mercados sobre los que no tenemos ningún control.

Pero seguramente no tenemos nada de qué preocuparnos.  Hasta el 2011 (cuando se determinó lo de  las seis remuneraciones como saldo mínimo intangible) la CTS siempre estuvo perforada.

 

¿Cómo que perforada? Veamos.

Evolucion CTS 01-14

Las barras azules son la suma de todos los depósitos CTS en los bancos, en soles y dólares. La línea naranja es la variación, año a año de esa suma. (Fuente SBS, elaboración, Luis Davelouis Lengua.)

Veamosentre los años 2000 y 2003, uno se podía llevar el 50% de cada depósito CTS (desde el 2004 se realizan dos depósitos al año, uno en mayo y uno en noviembre como si no supieras, antes de eso era mensual). Entre noviembre del 2003 y mayo del 2004 te podías llevar hasta el 100% de tu CTS depositado pues no había mínimo intangible. En junio del 2004 se arrepintieron y redujeron la libre disponibilidad al 90% . En julio la disponibilidad se redujo a 80%, en agosto a 70%, en setiembre a 60% y, desde octubre del 2004 hasta octubre del 2008, el límite de retiro fue otra vez de 50% de cada depósito CTS realizado por el empleador, independientemente del saldo en la cuenta. Eso explica el salto de casi 140% en los saldos CTS entre mayo del 2004 y mayo del 2005. Así de perforado estaba el sistema.

En el 2008 y principios del 2009 se nos vino la crisis financiera internacional y, otra vez, se decidió permitir retirar el 100% del depósito de la CTS en mayo y noviembre del 2009. Por eso y porque en el depósito de mayo del 2010 se permitió retirar hasta el 40% de los depósitos CTS y en noviembre el 30%, la suma de las cuentas de CTS casi no se movieron entre esos años (4,27% de mayo a mayo).

En estricto, es recién a partir de mayo del 2011 que se establece un saldo mínimo de seis sueldos para la cuenta CTS.

Recordemos que entre el 2001 y el 2006 el Sr. Alejandro Toledo fue presidente de la República, que su popularidad bajó hasta un insostenible 11% en algún momento y se pidió su vacancia por incapacidad mental (o moral, ahora vemos que daba lo mismo). Además, el primer año de su gobierno la economía apenas creció (0,2%) y más o menos hasta el 2004 no nos recuperamos. La CTS funcionaba como parte del sueldo y aunque esa no era su razón de existir, eliminar la disponibilidad libre hubiera sido un suicidio político en esas condiciones.

Lo preocupante es que la tasa de desempleo pasó de menos de 8% en el 2000 hasta casi 10% en el 2005 para recién bajar en el 2006. Ojalá que no nos pase de nuevo porque con un CTS más enano la gente que se quede sin trabajo y no pueda recolocarse en cuatro meses la va a pasar mal.

La verdad es que no sabemos cuál es el impacto real de liberar casi dos sueldos por persona en la economía, como puede inferirse de lo declarado por el presidente del BCR, Julio Velarde, cuando fue interrogado al respecto: “algún efecto debe tener en la reactivación”.

 

Por todo eso, piénsalo bien.

Ya no necesitas una TV nueva porque ya se terminó el mundial. Ropa ya te compraste y por eso estás endeudado hasta el cuello. Es improbable que te puedas comprar un carro con la porción de CTS que te van a dar. Así que mejor paga tus deudas, no hay nada más caro que una deuda con una tasa de interés alta (como las tarjetas de crédito y los créditos de consumo). Paga tus deudas caras y si te sobra algo anda al cine, tómate una chela y el resto guárdalo para irte de viaje o estudiar alguna cosa que esas son buenas inversiones. No lo olvides: el banco no te va a dejar de cobrar porque te quedes sin chamba.

Recuerda que todo lo que no necesitas, incluso si te lo regalan, es caro. No le des el gusto a coco liso.

 

DATO EXTRA:

Solo el 14% de la población económicamente activa tiene CTS, así que la probabilidad de que tú tengas CTS y de que este post te sea útil es bajísima.

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Luis Davelouis

La libertad se lleva dentro y se ejerce afuera. Es una decisión, nunca algo que te puedan dar. Soy periodista.